Sporting Kansas City tuvo un arranque muy malo de temporada. En esa pésima racha de más de 10 partidos sin ganar y con una producción raquítica al frente, en su mayoría no contaron con Alan Pulido – quien estaba volviendo de una lesión que lo dejo fuera de las canchas durante más de un año.
Una vez que Puligol fue agarrando ritmo, Kansas City fue otro equipo. Ligo rachas interesantes en el plano colectivo, y en el individual, el 9 mexicano de Sporting se metió en la pelea por el titulo de goleo. Al punto de llegar a estar como sublíder de ese departamento.
Pero parece KC se desinfla en la recta final de la temporada regular, justo cuando requerían de un empujón final para poder meterse en puestos de Playoffs. En duelo contra un rival natural por geografía e historia entre ciudades, St. Louis CITY SC acabo goleando 4-1 a Sporting KC. Y de paso, Pulido se fue en blanco por tercer partido consecutivo.
El partido estaba empatado sin goles hasta pasado el minuto 70. Ambos habían tenido sus momentos de dominio y opciones de gol. El portero Tim Melia le había negado el grito de gol a los locales hasta en dos ocasiones con un par de atajadones. Mientras que los postes les negaron la anotación a los visitantes.
Una vez que St. Louis, que es el sorpresivo líder de la Conferencia Oeste y que ya tiene boleto asegurado para la liguilla, logró romper el cero, se vinieron los goles en cascada a su favor. En un periodo de 12 minutos le clavaron cuatro a KC.
Samuel Adeniran abrió la cuenta con un remate de cabeza tras un centro proveniente de un tiro libre. Jared Stroud convirtió el segundo aprovechando un rechace defensivo que le cayó en el centro del área con tiempo y comodidad para definir.
Luego vinieron los goles del hombre de la noche, João Klauss. El brasileño firmó un doblete con dos estéticas definiciones. La primera de volea con parte interna, y la segunda con un potente disparo en el que le metió todo el empeine.
Klauss llegó a 10 goles en 17 partidos jugados en la campaña. Cabe señalar que se perdió muchos duelos por lesión. Además, es la cuarta ocasión que marca más de un gol en un mismo partido. Es decir, cuando el brasileño factura, generalmente lo hace por partida doble.
El gol de la honra lo consiguió William Agada en los últimos segundos del tiempo agregado.
