Promesas que cumplen y comienzan a pagar en el escenario más elevado.
Los jóvenes talentos latinos de la MLS respondieron con carácter en su primera gran cita: el Mundial de Clubes de FIFA 2025.
En el arranque del torneo, que se celebra en suelo estadounidense por primera vez en este nuevo formato, los tres representantes de la liga —Inter Miami CF, Seattle Sounders y LAFC— dejaron una impresión positiva.
Aunque ninguno logró sumar de a tres, todos demostraron que no vinieron a ser espectadores, sino protagonistas. Se plantaron sin complejos, hicieron correr a gigantes de otros continentes y elevaron el nombre de la MLS en la escena global.
En la primera jornada de la Copa del Mundo para Clubes, Al Ahly, el rey absoluto de África; Botafogo, campeón de América; y el Chelsea, monarca de la Conference League, fueron testigos de la nueva fuerza que emerge desde la liga estadounidense. La MLS no solo compite: sueña en grande y empieza a escribir su propia leyenda.
Inter Miami, el más cercano al triunfo
Inter Miami CF tuvo un estreno vibrante ante el aguerrido Al Ahly de Egipto, uno de los colosos africanos del torneo. En una primera mitad intensa, en la que todo indicaba que los ‘Faraones’ abrirían el marcador, emergió la figura de Óscar Ustari, quien firmó una actuación memorable. El arquero argentino detuvo varias acciones clave, incluyendo un penal a Mahmoud Trezeguet que ya se perfila como una de las mejores atajadas del certamen.
El empate sin goles no fue sinónimo de aburrimiento. Luis Suárez estuvo cerca de romper el cero con una llegada clarísima, salvada in extremis sobre la línea por la zaga egipcia.
En la segunda parte, Lionel Messi tomó la batuta y lideró la avanzada de unas 'Garzas' que se asentaron mejor en campo rival. Las ocasiones se multiplicaron, pero el arquero Mohamed El Shenawy se convirtió en figura y sostuvo a Al Ahly con intervenciones de alto nivel. El equipo de Javier Mascherano se marchó del Hard Rock Stadium con la sensación de que mereció más.
Federico Redondo fue uno de los puntos altos del equipo, asumiendo con madurez el rol de mediocentro y haciendo que la ausencia de Yannick Bright se notara poco.
Telasco Segovia y Tadeo Allende también completaron partidos correctos, mostrando destellos de su talento, pero dejando claro que aún tienen una marcha más por ofrecer. Con su pasado reciente en Europa, se espera que su adaptación sea rápida y que puedan marcar diferencia en los próximos encuentros, especialmente el jueves ante el FC Porto.
Segovia, que cometió el penal luego contenido por Ustari, ya sabe lo que es enfrentar al conjunto portugués: lo hizo como titular con Casa Pia en dos derrotas durante la pasada temporada de la Primeira Liga.
Porto, por su parte, también llegará urgido de puntos tras igualar sin goles en su debut, tras una campaña doméstica en la que quedó lejos del Benfica y del campeón Sporting. El choque en Atlanta promete ser clave para ambos.
La amenaza esmeralda
Durante la primera parte en el debut de Seattle Sounders en el Mundial de Clubes 2025, el ambiente en Lumen Field oscilaba entre la frustración y la resignación. El campeón de la Copa Libertadores, Botafogo, se imponía 2-0, y el gol local parecía una ilusión lejana, pese al empuje constante del equipo de casa.
En la segunda mitad, el Sounders acorraló a los brasileños, pero no conseguía la manera de transformar el dominio en gol, hasta que apareció Roldán.
Pero a 15 minutos del final, apareció Cristian Roldán, el alma de los Sounders, para cambiar el guion. Con un cabezazo que desvió la trayectoria lo justo para descolocar al arquero, recortó la diferencia y encendió de nuevo la ilusión en las gradas. No fue suficiente para empatar —el marcador final fue 2-1—, pero sí dejó una señal clara: Seattle no está aquí solo para participar.
Ese tanto, el primero de un club de la MLS en esta edición del torneo, sirvió también como símbolo de resistencia y carácter. Roldán, con su habitual entrega y versatilidad —ha jugado en casi todas las zonas del campo— volvió a demostrar por qué es una figura clave en la historia reciente del club.
Ahora, el reto es mayor. En el horizonte esperan dos pesos pesados del fútbol europeo. El Sounders saben que deben elevar aún más su nivel para competir de tú a tú con clubes que llevan décadas compitiendo en el máximo nivel en sus ligas y en el continente. La épica apenas comienza, y Seattle ya demostró que no se achica ante nadie.
Obed Vargas, el as bajo la manga
Obed Vargas no logró adueñarse del mediocampo como muchos esperaban en el duelo frente a Botafogo. La responsabilidad de ser el “patrón” en una zona tan exigente del campo pesó, algo comprensible para un joven de apenas 19 años.
Pero los verdaderos cracks se definen en los desafíos más duros, y el destino le tiene preparados dos titanes europeos: Atlético de Madrid y Paris Saint-Germain. No será fácil, el ritmo será feroz y el margen de error mínimo, pero Vargas tiene la oportunidad perfecta para crecer a la altura del desafío.
Porque los grandes jugadores no se miden por su edad, sino por su capacidad de responder cuando el escenario es más imponente. Y ahora, el escenario es gigantesco.
Aunque Seattle no sea el favorito en los próximos dos enfrentamientos, el centrocampista canterano Obed Vargas dijo que están deseando tener la oportunidad.
"Les puedo decir una cosa: no seré fanático cada vez que juguemos contra ellos", dijo Vargas sobre el Atlético. "Voy a estar motivado para ganarles y hacer todo lo posible por ganarles.
"Y luego, jugando contra los campeones de la Champions League, ya vieron el partido de hoy: 4-0. Son una potencia. Solo tenemos que salir a la cancha e intentar competir lo mejor posible".
Alex Roldán, Pedro de la Vega y Jesús Ferreira no lograron influir como se esperaba en el partido inaugural frente a Botafogo. Con escasa participación y pocas oportunidades para marcar diferencia, los tres talentos ofensivos quedaron en deuda. Ferreira mostró destellos en los primeros minutos con movimientos inteligentes, mientras que De la Vega casi se viste de héroe sobre el final con una chance clarísima que rozó el empate.
De cara al duelo frente al Atlético de Madrid, el desafío será aún mayor. El conjunto colchonero no perdona errores y obliga a sus rivales a jugar con máxima intensidad y precisión. Para Roldán, De la Vega y Ferreira, será clave encontrar espacios, mostrarse más activos y capitalizar cada oportunidad, por mínima que sea. Necesitan ser parte del circuito ofensivo desde el arranque y, sobre todo, ser determinantes en los metros finales.
Sin embargo, Seattle Sounders tiene un factor diferencial a su favor: la localía. Disputar los tres primeros partidos en Lumen Field, su casa, es una ventaja emocional y táctica que ningún otro equipo de la MLS tiene en esta Copa del Mundo de Clubes. Frente a su gente, en un entorno que conocen a la perfección, los Sounders pueden fortalecerse y encontrar la chispa necesaria para hacer historia ante gigantes europeos.
Los Angeles Football Club, la carta de la clasificación
LAFC plantó cara al Chelsea con más valentía y peligro del que muchos anticipaban. No solo compitió, sino que generó ocasiones claras frente a un rival de jerarquía europea. Lejos de replegarse, el equipo angelino fue valiente y ambicioso.
“Competimos”, dijo el mediocampista Mark Delgado después del partido. “Y sin duda podemos tener oportunidades siempre que nos mantengamos unidos y creamos en lo que podemos hacer”.
“Es extraño”, afirmó Delgado. “No ganar, pero aun así estar orgulloso de todo el grupo, de dar una buena pelea, de competir, de crear ocasiones y de tener, ya sabes, un poco de esperanza en la segunda mitad de marcar una o dos.
“El ritmo cambió un poco. Les pusimos las cosas difíciles. Definitivamente tuvimos muchas oportunidades y sentimos que creamos buenos momentos. Simplemente tuvimos muy mala suerte. Pero en general, estoy orgulloso del esfuerzo”.
David Martínez, solución en caso de emergencia
Entre los más destacados estuvo David Martínez, quien, junto a Denis Bouanga, conformó una dupla que puso en aprietos a la defensa inglesa durante buena parte del segundo tiempo. Aunque el gol no llegó, el equipo angelino se fue del campo con una certeza: tiene con qué ganar y avanzar.
Martínez fue más que un desequilibrante. Además de su habilidad para driblar, mostró inteligencia táctica: supo cuándo frenar el ritmo, cuándo encarar y cómo encontrar espacios para superar a Cucurella en el lateral. Por allí llegó una de las más claras en la segunda mitad para el LAFC.
En una plantilla repleta de experiencia, su frescura, creatividad y atrevimiento marcan la diferencia. Con apenas 18 años, el zurdo venezolano es una de las 'joyas' emergentes del torneo y una de las mayores promesas latinas en esta edición del Mundial de Clubes.
"Sabíamos que iba a ser un partido complicado. Sabemos lo que es el Chelsea, pero a pesar de este resultado creo que tuvimos algunas ocasiones que podíamos terminar de una mejor manera. Quizás si hubiésemos estado más concentrados, o un poco mejor al toque, podíamos haber marcado gol", afirmó el venezolano en zona mixta tras el partido. "Ya pasó y ahora al próximo partido. Vamos a dar el 100%"
El próximo reto para LAFC será ante ES Tunis, de Túnez, un rival que sobre el papel representa una oportunidad más accesible que el campeón de la Conference League. Con el respaldo de un primer partido competitivo y el crecimiento individual de figuras como Martínez, el equipo llega con impulso.
Inter Miami CF, Seattle Sounders y LAFC se preparan para seguir rompiendo moldes y buscar llegar con vida a la decisiva tercera jornada del Mundial de Clubes. La misión no es sencilla, pero tampoco imposible.
En una competición dominada históricamente por potencias europeas y sudamericanas, los equipos de la MLS tienen la oportunidad de escribir una página distinta. Y será, en gran parte, gracias al talento emergente que empieza a brillar con luz propia.
Porque si algo ha quedado claro en este torneo, es que el futuro de estos clubes ya está tocando la puerta... y viene con ganas de dejarla abierta de par en par.
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